Quiero compartir con ustedes estos dos versículos que han sido de gran bendición en mi vida.
Filipenses 4:6-7
Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesus.
No se si les pasa a ustedes pero, yo tendía mucho a preocuparme por cualquier cosita y no solo eso me imaginaba toda una película entera, me imaginaba todos los escenarios que podría pasar y eso me estresaba mucho, me ponía nerviosa y tensa por que yo ya había agotado todo lo que yo podía hacer para solucionar el problema o la situación que estaba atravesando.
Un día leyendo la biblia en Filipenses 4:6-7 cada palabra que leía era justo lo que necesitaba en esos momentos.
¡Gloria a Dios por eso!
Empecé a poner en práctica lo que el Señor me decía que hiciera paso a paso. Que no me afane, más bien que ore y esto ya todos lo sabemos. Nadamas es de ponerlo en práctica. Todo cambió, ahora cada vez que una situación quiere apoderarse de mí, hago mi parte, oro y se lo entregó al Señor. No voy a negar, es difícil soltar o dejar ir lo que te preocupa. Pero también en eso me ayudó el Señor.
En Mateo 7:7-11
Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra y al que llama, se le abre.
¿Quién de ustedes, si su hijo pide pan, le dará una piedra? ¿O si pide un pescado, le da una serpiente? Pues si ustedes, aun siendo malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más su Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que le pidan!
Yo le pedí que me ayudara a hacer lo que Él quería que yo hiciera, me escucho y me ayuda cada vez que surge algo que me puede quitar la paz y el gozo. Él nos ayuda a que podamos obedecer y a hacer su voluntad. Ahora puedo gozar de esa paz que sobrepasa todo entendimiento y el guarda mi corazón y mi mente y de este modo ya no me hago películas en mi cabeza ni se entristece mi corazón.
Mantengámonos en oración para estar fortalecidos y poner en práctica lo que nos dice Su palabra. Toda la biblia está llena de consejos para lidiar con todas las áreas de la vida.
En Salmos 119:105 dice "lámpara es a mis pies tu palabra y lumbrera a mi camino”, así que hermanos leamos y pongamos en práctica su palabra.