Como Dios nos ha escogido, elegido y amado desde antes de nacer, con nuestros errores e imperfecciones, como Él con su gran amor nos permitió ganar nuestra primera carrera y poder llegar hasta el vientre de nuestra madre primero.
El nos ama más que nadie, con ese amor de Padre que solo Él nos puede dar.
También como sus hijos nos demanda que cumplamos Sus mandamientos y sigamos Su ejemplo y vivamos como verdaderos cristianos siguiendo Su palabra y aplicándola a nuestra vida en nuestro diario vivir . Él bendice todo a nuestro alrededor, todo lo que nuestras manos toquen, y nos da de más para que podamos compartir con el que está en necesidad.
Él bendecirá a nuestras futuras generaciones, como lo dice su palabra.
“Si obedeces al Señor tu Dios, todas estas bendiciones vendrán sobre ti y te acompañarán siempre: Bendito serás en la ciudad, y bendito en el campo. Benditos serán el fruto de tu vientre, tus cosechas, las crías de tu ganado, los terneritos de tus manadas y los corderitos de tus rebaños. Benditas serán tu canasta y tu mesa de amasar. Bendito serás en el hogar, y bendito en el camino.” (Deuteronomio 28:2-6)
Oracion:
“Gracias te doy Padre porque solo Tu eres bueno, gracias por todo lo que me das, por siempre cuidar de mi y mi familia, ayúdanos padre a seguir adelante. Nos tomamos de Tu mano y a seguir confiando en Ti a pesar de las aflicciones y problemas de nuestro diario vivir. Que siempre seas Tu el centro de nuestras vidas, en el nombre de Cristo Jesús, gracias, Padre Amado. Amén.”